El Hyundai Sonata es desde hace años uno de los pilares más importantes de la firma en Estados Unidos junto al Elantra y aunque la demanda de los SUVs sigue creciendo, todavía se mantiene como un súper-ventas. Para seguir ganando clientela, la firma ha decidido presentar en Nueva York un lavado de cara más o menos importante.
Los cambios más importantes que recibe el modelo 2018 afectan al exterior, apostando por unas formas más dinámicas y agresivas. Para ello se han actualizado completamente los paragolpes, el diseño de las llantas de aleación y se han añadido nuevos elementos como los faldones laterales, un pequeño alerón o la extensión de los paragolpes aunque eso sí, dependiendo del acabado elegido.
En el interior algunos materiales mejoran su calidad y estrena consola entre los asientos. También son nuevos la instrumentación, el sistema de info-entretenimiento con pantalla táctil, el volante multifunción y se añaden dos tomas USB para los pasajeros de las plazas posteriores. De serie todos los Sonata incluyen alerta de objetos en ángulo muerto y en maniobras de marcha atrás, y en los más completos el asistente de cambio de carril con actuación sobre el volante.
Para hacerlo más cómodo y dinámico, Hyundai ha re-equilibrado el esquema de suspensiones, además de modificar las leyes de funcionamiento de la dirección. Se ha añadido una barra de torsión más gruesa y el sistema de frenado será más potente en las variantes de mayores prestaciones.
Bajo el capó el renovado Sonata podrá pedirse con el motor 2.0 Turbo de 245 CV en combinación con una nueva caja de cambios automática con ocho velocidades que sustituye al anterior de seis. Además de este bloque, las versiones de acceso irán asociadas con el conocido 2.4 GDI con 185 CV mientras que los ECO hacen uso del 1.6 TGDI con 178 CV, este último con caja de doble embrague y siete velocidades.
